martes, 25 de agosto de 2009

El Gran Gatsby (F. Scott Fitzgerald)


Sumido en el insomnio de un largo turno de noche en una clínica psiquiatrica, decidí ponerme al día con una novela clásica del siglo XX "El Gran Gatsby", de Scott Fitzgerald ,que siempre quize leer por que la emparentaba (ahora se porque) con ese otro monumento a la buena escritura del siglo pasado que es "El Gatopardo".
La novela es breve y supone que nos entrega el auge y caída de un "nuevo rico" en el periodo entre guerras de U.S.A., digo supone, porque la caída de Gatsby, es solo el pretexto para una intentona mayor, el guión es breve y escueto, casi una anécdota, Gatsby en medio de una infancia necesitada sufre la visión de un futuro oscuro en un medio altamente clasista y excluyente, a través de medios y acciones no muy santas (el fin justifica los medios) amasa una fortuna y decide una vez consolidado su cuota de poder recuperar al amor de su vida, que lo dejo de lado precisamente por su insolvencia económica, esto genera conflictos con el actual esposo de esta, un racista prepotente y filo fascista espantoso, el trágico y violento final se resuelve en un par de paginas bien escritas... hasta ahí nada muy novedoso, porque lo que al final quería Fitzgerald era un pretexto para mostrar un magnifico fresco de toda una clase social, clave en la lectura son las descripciones de las fastuosas fiestas y sus excentricos personajes, sus traiciones , su farsa, sus miedos, su monstruosidad... mientras adentro la borrachera y la música hacen lo suyo, afuera de la mansión esta Gatsby , lejano, melancólico, con el atardecer rojizo a sus espaldas, el viento tibio y la única razón por la cual quizás admite ser el anfitrión de todo esto...recuperar ese amor juvenil, quizás lo único inocente y verdadero que sintió jamas, lo único por lo cual valdría la pena dar la vida...
el sentido trágico se adivina en el aire, aunque uno no quiera, el tiempo y el destino hacen su trabajo demoledor y como decía Neruda "nosotros los de antes , ya no somos los mismos", la prosa con la cual esta escrita esta novela es lírica, suave, contenida, musical (como una melodía al piano) según Vargas Llosa eso es un defecto en El Gran Gastby, pero los gustos de Vargitas siempre ha sido lo retorcido, lo podrido, lo lúgubre, así que no es mucho su aporte.

Esta novela queda en el aire, una vez terminada, por que es una voz como de nuestro pasado, de como nos acostamos cada noche con nuestros sueños rotos, lo que pudo ser y no fue, y no sera jamás... y el maldito dinero y el clasismo, dos lineas historicas que hieren a Chile ahora y siempre.

" Gastby creía en la luz verde, el orgiástico futuro que , año tras año, aparece ante nosotros... nos esquiva, pero no nos importa; mañana correremos más de prisa, abriremos los brazos, y ... un buen día...

y vamos hacia adelante, botes que reman contra la corriente, incesantemente arrastrados hacia el pasado "

(El Gran Gastby)

Memorias y palabras. (Octavio Paz)


con el subtitulo de Cartas a Pere Gimferrer, Seix Barral publicó esta recopilación de cartas del Nobel Mexicano Octavio Paz a su amigo el escritor Francés, ilustre desconocido por estos territorios australes, la idea debiera ser buena en un principio pero a poco andar la superficialidad de las cartas comienza a cansar, el ego de Paz, su prosa recargada y cansina comienza a latear, el echo que sea un partido de frontón (no se publican las respuestas) hace imposible liar esta madeja de reclamos por adelantos monetarios sin cumplir, de deudas sin pagar, de autobombo descarado y zalamerias con escritores que a todas luces Paz pretendía algo a cambio, del solido intelectual que me impresiono gratamente en "Los Hijos del Limo" y el "Ogro Filantrópico" no hay luces. O mejor dicho del personaje que Paz creo de si mismo, no hay luces.
La sensación que me dejó, aparte de un aburrimiento espantoso, es de un tipo prosaico y vulgar, demasiado pequeño para su leyenda de intelectual "sobre el bien y el mal" que tanto le gusto cultivar en vida, en estas cartas solo habla su deseo de notoriedad, su ego descarado, su ambición de dinero y una prosa ramplona que desilusiona a cada punto y coma... de verdad que lo suyo era la cátedra, el mundo de la ideas allá bien arriba, donde no hay que pagar la cuenta de la luz ni tener que ir a comprar el pan

Welcome to the Jungle


Vivir en toda gran capital es un costo alto, en soledad personal, en perdida de calidad de vida, la gran crisis tiene que ver con aquello de que si la tranquila vida de provincia, con sus tiempos y letanías, tiene su equivalente en un sueldo a fin de mes... la verdad , muchas veces me siento deprimido, sin motivación, triste, y demasiadas veces pienso que nunca debí abandonar mi pueblo, pero en medio de las angustias el mismo vicio impune (como decía Alone) viene al rescate...leer, leer, hasta la última página, como bebiendo de un cáliz de vida y sangre, vivir otras vidas, vivir otros destinos, asomarse a mundos fantásticos, tétricos o maravillosos, husmear como un perro en otras ideas, en otras locuras, en otros sueños...vivir en resumen, solo vivir.
Pero me faltaba dejar testimonio de esta empresa, antes que mi alzaimer me alcance y borre todo, borre tantos momentos hermosos o tristes frente a la pagina escrita, lo hago como un homenaje pequeño a los escritores del mundo y sus molinos de viento, y en especial a mis padres que me legaron este humilde tesoro de saber leer, a mis amigos con quienes compartimos vinosas tertulias literarias en infinitas noches de amistad y juventud... y a todos los que vendrán y encontraran en la literatura el ultimo barco antes del naufragio final...